Volvi!
Luego de tres dias en Venezia ahora toca prepararme para cambiar de rumbo, esta vez a lo de un amigo en Firenze y despues parece que no me va a quedar mas remedio que buscar trabajo.
Que se puede decir de un lugar donde las paradas de colectivo estan montadas sobre flotadores, los camiones de bomberos son lanchas enormes y los negocios de las marcas mas lujosas conviven con paredes descascaradas por la humedad?
Venezia es una invitación a caminar de noche, cuando la mayoría de los turistas se fueron a dormir y en las callecitas se mezclan el ruido del agua con el murmullo de los bares y los campos (plazas) se llenan de gente conversando y tomando un Martini.
Otra vez de mochilero y en albergues como mas me gusta, todo el dia dando vueltas por ahi sin rumbo ni horarios, y atravesando la ciudad a las corridas de noche para llegar antes de que cerraran las puertas del hostel Santa Fosca.
Y una última noche inmejorable, sábado en la calle y dando vueltas hasta tomar el tren de las 5:15 que me depositó nuevamente en el calor milanés.
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